La reclamación de impagados es un proceso que se puede realizar por vía amistosa o por vía judicial, cuyo fin es que el acreedor logre el pago de una deuda legalmente contraída por un deudor.

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Gestionar una reclamación de impagados eficaz

Cuando haya transcurrido el plazo establecido para el pago de una factura, contrato, pagaré, letra de cambio o cualquier otro título valor, y el deudor no haya cancelado dicha deuda, se puede iniciar la reclamación de impagados.

El acreedor puede iniciar el reclamo por vía amistosa, comunicándose, preferiblemente por escrito, con el deudor para intentar acordar un plan de pago. Si esta vía no da los frutos esperados, puede acudir a la vía judicial para exigir el pago de la deuda.

Es importante recordar que para hacer la reclamación de impagados se debe contar con la documentación que demuestre la existencia de la deuda, como facturas, contratos, acuerdos de pago, etc. Igualmente, se debe saber, que el acreedor tiene derecho a reclamar:

Total adeudado por impagos.

Intereses acumulados sobre el saldo vencido.

Costes asociados a la reclamación de impagados, como los honorarios por representación legal.

Pasos para hacer la reclamación de impagados

Es necesario seguir determinados pasos para hacer una reclamación de impagados, los mismos se detallan a continuación:

Confirmar la existencia de la deuda

Se debe verificar toda la documentación probatoria de la existencia de la deuda, como facturas, contrato, recibos de entrega o de realización de servicios, etc., que comprueben que el servicio se prestó y no hay errores de facturación.

Contactar al deudor

Es necesario contactar al deudor a fin de comunicarle la existencia de la deuda e instarle a pagarla a la brevedad posible, para ello se recomienda utilizar comunicaciones por vía correo electrónico, carta certificada o llamada telefónica

La comunicación debe hacerse en un tono respetuoso y amistoso, ya que la idea es intentar llegar a un acuerdo entre las partes para lograr el pago de la deuda lo antes posible. Se recomienda proponer al deudor alguna fórmula de pago que le facilite realizar el pago de la deuda y que el mecanismo sea favorable para ambas partes.

Realizar una reclamación formal

Si la comunicación no ha tenido éxito, se recomienda enviar una reclamación formal, en la que se describa:

1. Base de la deuda.
2. Importe adeudado.
3. Fecha de vencimiento.
4. Plan propuesto para saldar el impago.

Esta comunicación debe enviarse por carta certificada o burofax a fin de tener pruebas de haber realizado este paso, lo cual es fundamental si se tiene que ir a la vía judicial para la reclamación de impagados.

Reclamación por vía judicial

En caso de no lograr un acuerdo por vía amistosa para el pago de la deuda, es necesario llevar la reclamación de impagados a la vía judicial, para ello, se recomienda contar con asesoría legal especializada, a fin de realizar el proceso de forma más rápida y sin complicaciones.

Existen varias formas legales por las que se puede intentar la reclamación de impagados, una de las más utilizadas actualmente es el procedimiento monitorio, por ser una vía más sencilla y rápida para lograr el pago de deudas. 

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